Nombre del espectáculo: IL CORVO
Fecha de estreno: 21 Diciembre 1961
REPARTO
Ricciolina LUEGO Smeraldina: AÍDA LUZ
Zan Ganassa LUEGO Truffaldino: JORGE LUZ
Scappino LUEGO Brihella: OSCAR E. BAZAN
Trapola LUEGO Tartaglia: CARLOS FIORITI
Bagolin: JUAN CARLOS ALSINA
Capitán Sgangaratto: ADOLFO GARCÍA GRAU
Pantalone: ZELMAR GUEÑOL
Olivetta LUEGO Paloma 1: MARTHA MAFFEZINI
Flaminia LUEGO Paloma 2: ANADELA ARZON
Leandro LUEGO Caballo: CARLOS ALVARENGA
Clarinetista LUEGO Dragón: CARLOS MUÑOZ
Policía LUEGO Príncipe Norando: TINO PASCALI
Millo Rey de Frattombrosa: ARIEL ABSALON
Príncipe Jennaro su hermano: GUILLERMO HELBLING
Armilla princesa de Damasco, hija de Norando: MARÍA DE LA PAZ
Autor: CARLO GOZZI
Escenografía: RAGUCCI – MADANES
Dibujo de la Portada del Programa y Vestuario: EDUARDO LERCHUNDI
Música: RODOLFO ARIZAGA
Asistente de dirección: HÉCTOR J. ARAGONES
Asistente de producción: MIGUEL ANGEL LUMALDO
El Teatro Caminito ha sido creado, organizado y dirigido desde 1957 por
CECILIO MADANES
SALA
Teatro Caminito
Barrio de La Boca
CARLO GOZZI (1720 – 1806). Escritor italiano, fue uno de los mayores representantes de la oposición al movimiento ilustrado en el siglo XVIII. Sus obras nacen como reacción a las de Pietro Chiari y Carlo Goldoni, a los que acusaba de ser malos escritores e inmorales.
Su debut teatral se produce en 1761 con “L’amore per le tre melarance o Analisi riflessiva della fiaba” (El amor de las tres naranjas o Análisis reflexivo del cuento de hadas) llevado a la escena por la compañía de Antonio Sacchi, probablemente la última gran compañía de commedia dell´arte.
Realizó la adaptación de una veintena de obras españolas del Siglo de oro: ·”La principessa filosofa” (La princesa filósofa) o “Le Droghe d’amore” (Las medicinas del amor).Tradujo también algunos textos del teatro francés.
Traductor: TULIO CARELLA sobre una versión libre de GIORGIO STREHLER (Director del Piccolo Teatro de Milán).
SÍNTESIS ARGUMENTAL
Millo, el rey de Fratombosa (ARIEL ABSALON) está a punto de casarse con Armilla, la princesa de Damasco (MARÍA DE LA PAZ). Pero sospecha que su hermano Jennaro (GUILLERMO HELBLING) anda en amores con su prometida.
A pesar del amor que ambos hermanos se tienen, estas sospecha está a punto de desencadenar un profundo odio entre ellos, sumado a la sed de venganza de Pantalone (ZELMAR GUEÑOL)Pantalone (ZELMAR GUEÑOL)Morgana contra Millo, por haber matado a un cuervo.
PRODUCCIÓN
Las casas de la calle Caminito han sido pintadas bajo la dirección de BENITO QUINQUELA MARTÍN.
Las grabaciones musicales y el material de iluminación han sido cedidos gPantalone (ZELMAR GUEÑOL)Pantalone (ZELMAR GUEÑOL)Pantalone (ZELMAR GUEÑOL)entilmente por PHILIPS ARGENTINA S.A.
El vestuario de “Il Corvo” ha sido realizado totalmente con telas creadas especialmente por los establecimientos textiles “ARRIYO”.
El espectáculo cuenta con un préstamo de $400.00, otorgado por el Fondo Nacional de las Artes, que nos ha permitido realizar: el Vestuario, Escenografía, Utilería, Peluquería, Accesorios, Instalaciones de Luz y Sonido.
Funciones: Martes, Miércoles, Jueves 21:30hs.
Viernes, sábados, domingos y vísperas de fiestas: 20 y 22:30hs.
LA COMPAÑÍA DESCANSA LOS DIAS LUNES Y LA SEMANA DE CARNAVAL
Boletería del Teatro: LAMADRID 780
FIGURINES
de Eduardo Lerchundi
1. Ricciolina (AÍDA LUZ)
34 x 24.7 cm
13.38 x 9.72 in
2. Esmeraldina (AÍDA LUZ)
32.5 x 23.5 cm
12.79 x 9.25 in
3. Olivetta (MARTHA MAFFEZINI) y Flaminia (ANADELA ARZON)
33.5 x 23.5 cm
13.18 x 9.25 in
4. Zan Ganazza (JORGE LUZ)
32.6 x 23.4 cm
12.83 x 9.21 in
5. Pantalone (ZELMAR GUEÑOL)
32,5 x 24 cm
12.79 x 9.44 in
6. Trápola (CARLOS FIORITI) Partaglia
34 x 24.7 cm
13.38 x 9.72 in
7. Príncipe Norando (TINO PASCALI)
34 x 24.5 cm
13.38 x 9.64 in
8. Policía (TINO PASCALI)
32.6 x 23.7 cm
12.83 x 9.33 in
9. Capitán Sgangaratto (ADOLFO GARCÍA GRAU)
34 x 23.5 cm
13.38 x 9.25 in
10. Scappino (OSCAR E. BAZÁN)
32.6 x 24.3 cm
12.83 x 9.56 in
11. Bagolín (JUAN CARLOS ALSINA)
32.2 x 22.5 cm
12.67 x 8.85 in
12. Clarinetista (CARLOS ALVARENGA)
32.5 x 24 cm
12.79 x 9.44 in
13. Trompetista
32.5 x 24 cm
12.79 x 9.44 in
14. Milo Rey (ARIEL ABSALÓN)
49.7 x 35 cm
19.56 x 13.77 in
15. Armilla Princesa (MARÍA DE LA PAZ)
50 x 35 cm
19.68 x 13.77 in
16. Jennaro Príncipe (GUILLERMO HELBLING)
50.5 x 34.5 cm
19.88 x 13.58 in
17. Caballo
34 x 24.5 cm
13.38 x 9.64 in
18. Máscaras
32.7 x 24.1 cm
12.87 x 9.48 in
EN ESCENA

Ricciolina (AIDA LUZ), Armilla (MARÍA DE LA PAZ), Jennaro (GUILLERMO HELBLING) y Millo (ARIEL ABSALON).

Zan Gannassa (JORGE LUZ).
Zan Gannassa (JORGE LUZ) asomado desde los balcones de las casas lindantes a Caminito.
PRENSA
La Nación
16 Noviembre 1961
«CAMINITO»
IL CORVO, DE CARLO GOZZI
Uno de los figurines de Eduardo Lerchundi para el próximo espectáculo de Caminito. / «Pantalone», el clásico personaje de «La Commedia dell’Arte» aparecerá vestido de esta forma en «Il corvo».
TEATRO CAMINITO
Por ROBERTO GALAN
Luego que el mundo entero cantó las estrofas del tango de Filiberto (…CAMINITO QUE EL TIEMPO HA BORRADO…), la glorificación eterna de la inmortal canción -paladín entre los tangos románticos llegó por conducto de un tal Quinquela Martín, e insigne pintor y alma máter propulsora de ese conglomerado sui géneris y del cual todos queremos ser ciudadanos, nos referimos a la República de la Boca (¡de pie, señores!)
Allí, incrustada en un paisaje, que Quinquela conoce al dedillo, está la cortada Caminito, cien metros de poesía y del más puro tipismo genovés; casas vetustas que tratan de solidificarse ante el embate constante del progreso. (Ojalá sigan así, siempre.) Sobre esos cien metros de la cortada, que los boquenses exhiben con orgullo paternal, se levanta el teatro Caminito donde Cecilio Madanes instaló un cenáculo en el cual se permite el lujo de dar rienda suelta a talento creativo y a su buen gusto peculiar.
Cuesta imaginar que en nuestro país tradicionalmente vergonzoso ante cualquier emprendimiento calificado anticipadamente de audaz se haya construido un teatro al aire libre, rodeado de casas, con un público que transita sobre las azoteas y espía respetuosamente.
Para los boquenses el teatro Caminito es un baluarte que se defiende por cualquier medio. Na da de ruidos ni gritos en sus cercanías. Los actores actúan, de modo que… ¡SI LENCIO!… así lo sienten los vecinos y hasta los niños a quienes sus padres «obligan» a estarse quietecitos, pues «están actuando en Caminito».
Cecilio Madanes nos explica (… EL TEATRO TIENE 800 PLATEAS O SILLAS QUE FUERON DONADAS POR 800 PERSONAS, DESDE VECINOS DE LA BOCA HASTA EMBAJADORES Y MINISTROS. CADA UNO DE ELLOS TIENE EL DERECHO DE ASISTIR GRATIS A LA AVANT-PREMIER DE CUALQUIER OBRA QUE ESTRENEMOS).
Carlos Fioriti, versátil actor. Una garantía. / Gente joven. Martha Maffesini y Anadela Arzón.
Jorge Luz -un impecable «Truffaldino»-, sinónimo de actor entusiasta y en plena y vigorosa superación. Estudioso y aplicado.
No hay reparos en la carrera de Aída Luz. Tanto en cine como en teatro, Aída sabe actuar. Muy buena primera actriz, y muy mona. / Zelmar Gueñol, siempre bien, eficiente y correcto. / A Caminito los niños entran gratis. Tienen un lugar especial para ellos indicado por Madanes, a quien vemos con su «clientela» diaria.
UN «CAMINITO» TRANSFORMADO EN CENÁCULO DEL MEJOR TEATRO CLÁSICO DEL MOMENTO
Los vecinos asisten a las representaciones desde sus respectivas ventanas. Lo hacen en el más absoluto silencio. (…TODO ESTO ES UN MISTERIO. LOS VECINOS TIENEN AL TEATRO COMO ALGO DE SU PROPIEDAD, LO DEFIENDEN A MUERTE. CITARÉ UN CASO ESPECIAL. TODOS LOS DIAS UN ACTOR RECITA DESDE UNA AZOTEA PARTE DE LA OBRA, Y, POR CONSIGUIENTE, DEBE QUEBRAR LA INTIMIDAD DE SU MORADOR. PUES BIEN, TODOS LOS DÍAS ESE ACTOR ES INVITADO A COMER Y SE LE ATIENDE CON VERDADERO CARIÑO). La compañía actúa bajo el sistema de cooperativa. (…TENEMOS UN PUNTAJE DE 2 A 20 PUNTOS DE ACUERDO A LA CATEGORÍA DE CADA UNO. LUEGO SE HACE UNA DIVISION SOBRE INGRESOS). Madanes nos informa que la obra costó mucho dinero en su montaje, que la ropa solamente llevó una erogación de más de medio millón de pesos (magistralmente realizada por Eduardo Lerchundi) y que para «aguantar» esos gastos disponen la generosa…
TEATRO CAMINITO
…ayuda de los avisos del programa. Mientras charlábamos con Madanes, Boca Juniors jugaba contra un equipo europeo en su estadio a pocas cuadras. También Caminito estaba lleno; dos manifestaciones populares con seres ansiosos de recibir el impacto del gol, por un lado, y por el otro la expectación de un equipo de actores que Madanes maneja cabalmente y que en nuestro medio (también hace poco en Brasil) ya tiene un público frenético, anhelante y cuidadoso de no perderse estas brillantes manifestaciones de exquisito arte interpretativo.
«Il Corvo» de Carlo Gozzi es una fiesta teatral, alarde de capacidad de actores singularmente dotados y un director cuidadoso que extrajo de su «gente» lo mejor del mas puro histrionismo.
Esta quinta temporada de Caminito, con el auspicio de la Municipalidad de Buenos Aires, pone en evidencia varias cosas, entre ellas, que esta iniciativa de hacer teatro al aire libre en una cortada del más pintoresco barrio de la Capital merece el apoyo general por lo plausible de su finalidad.
Nos decía también Madanes: (…EN EL ESPECTÁCULO DEL AVENIDA PUSE EL ALMA… AQUÍ, ¡EL CORAZÓN!).
La perpetuidad del nombre que Filiberto eligió para su inmortal tango tiene un aval de sólidos valores en el grupo del teatro Caminito. Muchos turistas visitan curiosos la cortada boquense donde antes transitaron boteros y capitanes trasnochados y donde ahora se rinde culto a Talía con un fervor y devoción que permite cualquier exhibición de orgullo para los que queremos a nuestra ciudad de Buenos Aires.
Platea
Diciembre 1961
CAMINITO: RECREO VISUAL CON COSAS CONOCIDAS
«El cuervo», tragicomedia de Carlo Gozzi, adaptada por Giorgio Strehler y estrenada por el Teatro Caminito en traducción de Tulio Carella. Puesta en escena: Cecilio Madanes. Escenografía: Ragucci y Madanes. Vestuario: Lerchundi. Actores: Aída Luz, María de la Paz, Zelmar Gueñol, Jorge Luz, Carlos Fioriti, Tino Pascali, Ariel Absalón, Guillermo Helbling y otros. Comentarios musicales de Rodolfo Arizaga.
Con dos arcadas y un distante León de San Marcos, el Teatro Caminito se trasladó a Venecia. En su tablado de la Boca presentó -probablemente por primera vez en nuestro país- «El cuervo», del contemporáneo siciliano de Goldoni, Carlo Gozzi. La obra fue dada a conocer en una adaptación libérrima del director del Piccolo Teatro de Milán, Giorgio Strehler. En la que se aligeraron los elementos ingenuamente retóricos del original y se alteró su estructura. Gozzi pertenece a esa etapa del teatro italiano en la que se redescubrió que los escritores también tenían importancia.
Para reaccionar contra las tipificaciones naturalistas que se le reprochaban al abogado Goldoni, el conde Gozzi concibió espesas anécdotas con príncipes malditos, dragones infames y dulces monólogos de amor. Junto a ello conservó algunos sanguíneos personajes de la comedia del arte. El resultado está constituido por obras curiosas, impregnadas de una atractiva ingenuidad, generalmente enfáticas y que ofrecen enormes dificultades escénicas, sobre todo en lo que atañe al criterio de la interpretación. Strehler flanqueó esas dificultades ubicando a la obra en un plano de juego libre en el que se desarrollan dos acciones paralelas con igual intensidad. Tienen tanta importancia los manejos del corrupto Pantalón, capitán de la «troupe», como las inflamadas confesiones del Rey de Frattombrosa.
No es fácil deslindar en el Teatro Caminito los méritos artísticos de sus presentaciones, de otros factores de atracción que dependen de la parte promotora de los mismos. Ambos están asociados a una única persona: Cecilio Madanes. Se advierten rápidamente dos cualidades: Madanes sabe qué hacer en Caminito, y además sabe que el mejor camino para llevar al público hacia los autores de otro siglo es tratar a sus obras sin prejuicios formales y con modales despejados. Ambos supuestos se dan nuevamente en la versión de «El cuervo».
Es una obra apta para el aire libre, y respecto de la cual las voces de los vecinos, del teatro, el ruido de los micrófonos o las caídas de los actores no gravitan. Todo forma parte de la convención Caminito. En el otro sentido, Madanes ha tratado su puesta de «El Cuervo» sin subterfugios formales, tratando de extraer del Capitán, de Tartaglia, de Scappino y Truffaldino el partido cómico más directo posible. Claro que en este sector se advirtió también una limitación: el juego señalado a los actores no es inspirado. Se reconocen efectos, recursos y combinaciones aplicados por Madanes en otros espectáculos. Ello conspira contra el brillo del resultado último, porque en el plano de atracción visual en que se colocan las versiones de Caminito la sorpresa y la originalidad cuentan como factores decisivos.
Además -y esta puede ser la objeción menos salvable- el espectáculo confunde las dos acciones que contiene la obra, y como consecuencia las pálidas intervenciones del príncipe (Helbling), del rey (Absalón) y Armilla (María de la Paz) quiebran el ritmo de la versión. A sus intervenciones le falta el poder de sugestión que abriría una nueva perspectiva para la apreciación total de «El cuervo».
El nivel de la interpretación es desequilibrado. Las características vivas de Aída Luz, Carlos Fioriti, Jorge Luz (repetido) y Zelmar Gueñol no coinciden por ejemplo con la composición que Martha Maffezini y Anadela Arzón realizan de las Palomas, o con la irremediable languidez de Ariel Absalón.
Los detalles del decorado ideado por Ragucci y Madanes permiten un juego amplio y franco por parte de los actores. El vestuario, de Lerchundi, carece de la síntesis empleada en otros sectores del espectáculo, y la música, de Rodolfo Arizaga, es trillada.
Foto 1: Carlos Fioriti divirtiéndose y divirtiendo. La intervención de los personajes que caricaturizan a la Comedia del arte constituye la parte festiva y feliz del espectáculo. Aída Luz juega su parte con soltura y comodidad. En primer plano, Jorge Luz, que repite recursos conocidos, con la misma convicción.
Foto 2: Un cierto público de Caminito: Gracias a Cecilio Madanes los textos de autores antiguos pueden ser audibles para sus oídos.
Carlos Izcovich